colaboraciones 52 PACKAGING a adaptación a las nuevas regulaciones de la Unión Europea (UE), las nuevas tecnologías aplicadas a la cosmetología (con una mayor conexión entre neurociencia y belleza) y la evolución del consumidor, cada vez más informado y sensible en cuando al respeto medioambiental, marcan el futuro del sector cosmético. En cuanto a la regulación, en diciembre de 2024, el Consejo de la UE aprobó el nuevo Reglamento de Envases y Residuos, que fija objetivos de reutilización, limita envases de un solo uso y exige minimizar su uso, abordando todo el ciclo de vida de los envases. Tal como informa Packnet, la nueva normativa incluye, entre otros, los siguientes requisitos para los envases: aObjetivos para 2030 y 2040 de un porcentaje mínimo de contenido reciclado (hasta el 65 % para las botellas de plástico de un solo uso en 2040). aMinimizar el peso y el volumen de los envases y evitar los innecesarios. aMinimización de las sustancias preocupantes, incluida la restricción de la comercialización de envases en contacto con alimentos que contengan sustancias alquil perfluoradas y polifluoradas (PFAS) si superan determinados umbrales. Los requisitos de etiquetado, marcado e información deben facilitar la clasificación y la elección de los consumidores. Respecto al consumidor, Mintel ha anunciado tres tendencias clave que afectarán a la industria global de belleza y cuidado personal en 2025: -«(Mi) conocimiento es poder»: los consumidores trabajarán de forma más inteligente (no más dura), combinando conocimiento, herramientas y tecnología para lograr soluciones personalizadas y obtener resultados superiores. -«Cambiando el rumbo»: como el efecto del cambio climático se hace más evidente, se espera que las marcas consideren las implicaciones eco-éticas a medida que los consumidores demandan una conexión perfecta entre las prácticas éticas y las soluciones de belleza de alto rendimiento. -«Piense lento, muévase rápido»: al priorizar la prevención sobre la reparación y adoptar la simplicidad, los consumidores comenzarán sus "rutinas" antes, integrando experiencias ricas en sensaciones en la búsqueda de un cuidado de la piel personalizado. En 2025, en belleza, se enfatizará la comodidad y el bienestar emocional, por lo que la neurociencia y la sensorialidad cobran cada vez más importancia. En este sentido, a través del proyecto Cosmefeel, AINIA ha implementado técnicas como la electroencefalografía (EEG), utilizada para medir la actividad eléctrica del cerebro mientras los consumidores interactúan con los proL En 2025, se enfatizará la comodidad y el bienestar emocional, por lo que la neurociencia y la sensorialidad cobran cada vez más importancia Envases cosméticos, sensorialidad y sostenibilidad ALPLAhana
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