El Beauty Cluster Barcelona (BCB), asociación que agrupa las principales empresas del sector de la belleza y la salud, sigue creciendo. Recientemente se han incorporado a la organización ocho nuevos socios: Ferrer, Entema, Erayba Hair Cosmetics, SimCosmetic Biotech, Chemir S.A., Gandiva, ShopperTec y Taüll Orgànics.
El grupo farmacéutico Ferrer confirma su adhesión al BCB, empezando así una relación de confianza y networking. Jordi Ramentol, CEO de Ferrer, afirma que “nuestros productos se venden en todo el mundo para satisfacer las necesidades de aquellos que exigen la más alta calidad en el cuidado de la piel, la salud, la higiene y el autocuidado. Creemos que el compromiso por la innovación, la internacionalización y la interrelación del BCB nos ofrece una oportunidad para el crecimiento como parte de nuestro objetivo de ampliar aún más nuestra presencia en los mercados internacionales”.
Laboratorios Entema, así como la empresa Erayba Hair Cosmetics y la compañía SimCosmetic Biotech, también se han incorporado al Beauty Cluster, reafirmando su apuesta por estar presentes en los foros que les permitan ampliar sus conocimientos y compartir sus experiencias vinculadas con el sector.
La empresa Chemir S.A., por su parte, se añade al BCB, mostrando así su consolidación como empresa de suministro de materias primas para la industria cosmética y de dermofarmacia. De origen familiar, fundada en Barcelona, desarrolla, controla y comercializa con marca propia, excipientes, filtros solares, etc.
Gandiva “es cosmética vegetal en tu piel”. La empresa se define como una forma alternativa de querer a tu piel, de mimarla. Se dedica a la cosmética vegetal, formulada con principios de aromaterapia y fitoterapia.
Por su parte, la consultoría comercial ShopperTec es experta en el punto de venta y la llegada a la farmacia de los productos. Taüll Orgànics, la última de las ocho nuevas incorporaciones al Beauty Cluster Barcelona, es una empresa familiar especialista en la elaboración de productos cosméticos de alta eficacia. La base de su éxito es la utilización del poder de las plantas autóctonas pirenaicas, que potencian las cualidades de sus productos, ya que están cultivadas en alta montaña y libres de cualquier tipo de contaminación.
