LUZI sigue preparando su traslado a su nueva sede. El edificio en el que se encuentran ahora está cargado de historia: han pasado de una plantilla de unas 15 personas en 1968 a unas 130 en la actualidad. El volumen de negocio ha crecido de unos 6 millones de CHF a unos 70 millones de CHF. Y ha sido la cuna de grandes y exitosas fragancias. También, por supuesto, ha sido el marco de innumerables historias personales.
Para conmemorar esta importante época de la historia de LUZI, la compañía ha decidido inmortalizar su sede histórica con la ayuda del artista hiperrealista suizo, de fama internacional, Christoph Eberle.
Así que las imágenes que acompañan esta noticia no son una simple foto, sino que son una auténtica obra de arte en forma de cuadro que pronto ocupará un lugar apropiado en el muro del patrimonio de la nueva sede de LUZI.
