Según la EPA del tercer trimestre que recoge el análisis de Randstad Reserch, el 10,3% de los trabajadores ocupados, un total de 1,98 millones de personas, teletrabajaron desde sus domicilios. Esta cifra fue significativamente inferior a la medida en el segundo trimestre, en el que 3,01 millones de personas teletrabajaron más de la mitad de los días. El descenso trimestral es consecuencia de que en determinados sectores y regiones la actividad laboral se ha podido desarrollar de manera más normalizada durante el tercer trimestre y el recurso al teletrabajo no ha sido una solución tan necesaria para poder mantener la actividad.