¿Ha cambiado mucho el mundo del diseño desde que abrió su estudio, Ciclus, en 2001?
Sí, muchísimo, ahora somos cada vez más estudios y diseñadores que estamos comprometidos con nuestro entorno a la hora de diseñar. En 2001, era una de las pocas que diseñaba teniendo en cuenta el pensamiento circular. De hecho, este concepto no existía de manera formal, tampoco existían las palabras ecodiseño y sostenibilidad. Los pocos que hablaban del tema, hablaban de reciclaje. Hoy sabemos que el reciclaje no es la solución. La premisa principal de la sostenibilidad es REDUCIR: hacer lo máximo con lo mínimo, optando siempre que sea posible por materiales y procesos de producción locales, certificados y no contaminantes.