La popularidad de las fragancias de ambientación ha experimentado un alza exponencial en los últimos años. Si bien en el año 2020 las ventas se ralentizaron en los primeros meses, debido a la situación especial generada por la pandemia, dado el interés del consumidor español en la ambientación, el mercado remontó sus ventas en un 2,4 % hasta llegar a los 325,9 millones de euros de facturación en mayo del pasado año (¹).